"""¿Cómo Estás?""" (sermon :v)

La gente seguramente suele preguntarte "¿Cómo estás?" a diario, porque por lo menos podrían cumplir con la regla de aceptación social, la regla de sanidad mental que """Debería""" tenerse para entablar una conversación y/o relación con alguien, la sanidad comunitaria. Pues a mí no.
Hace como unos siete meses -si, los conté- no escucho una mínima pizca de interés en mí de parte de nadie, y -sinceramente- creo que tampoco nunca nadie me preguntó realmente cómo me siento.
Me dí cuenta de que en lo que las personas se interesan al hablar conmigo es terminar el ciclo básico de la conversación para querer contarme cada **** (censored :v) detalle de sus vidas y pedirme opiniones al respecto. Lo peor es que yo -según algunos- doy muy buenos consejos -no, no estoy queriendo agrandarme- pero la verdad es que nunca supe cómo seguirlos. Existen muy pocas personas que haya conocido en mi vida que tal vez realmente me preguntaron si estaba bien -aunque seguramente con el mismo propósito que las demás-. Nunca le conté a alguien verdaderamente cómo me siento. Pero supongo que si no les importa no tendría por qué importarme a mí, ¿No es así?.
Cada día, y aunque no lo acepte del todo, puedo sentir cómo mi estabilidad se va quebrando y cómo mi postura se va encorvando, cómo mis ojeras no irán cesando, cómo mi mueca definitivamente irá cambiando, cómo mi sonrisa se va reemplazando por un gesto irónico y siniestro, cómo la máscara que llevo se va corriendo, y cómo mi cordura se va rompiendo. Pero soy sólo una pequeña niña de secundario con la sonrisa rota y los auriculares a tope... o tal vez sea una desequilibrada mental con el razonamiento muy torcido y un gesto de creepypasta... o tal vez sea otra del montón que siguen pensando que si deben vivir así eternamente, ya no lo vale. Nunca lo sabremos, pero el tema es que soy yo. Y ese es el problema.
Tengo enfermedades raras que temo alejen a los pocos que llegan a entenderme. a los que más quiero, y los vuelvan en mi contra. Tengo miedo de desilusionar -otra vez- a la gente que me importa siendo quién soy. Tengo miedo de despertarme una mañana y no querer imaginarme una siguiente. Tengo miedo de mi corazón, de mi alma, y de mi mente. Me temo.
Se que un día mi reflejo se va a consumir justo frente al espejo, que voy a quebrarme del todo, y que lo único que voy a conseguir es reírme como psicópata en frente de éste. Porque soy ridícula, porque doy miedo, porque soy risa. (ahora que lo pienso eso rimaría bastante bien)
A todo esto -y resumiendo mi propia pregunta-, no. No estoy bien. No estoy j*did*mente bien, me quiebro, me temo, y si fuera tú ya estaría corriendo. Lloro noches como esta en las que escribo por el dolor de saber que en cualquier momento no voy a aguantar más, me voy a consumir sin siquiera darme cuenta, y entonces no voy a responder de mis actos.
Me siento mierda.
Pero ahora, responde honestamente ¿Acaso eso te importa?, por supuesto que no. La naturaleza humana se basa en el egoísmo y el auto-abastecimiento, de otra manera, ¿Piensas que en serio hay gente que lee este blog?
Sé que la gente con la que hablo se aburre al escuchar mi historia, así que para ahorrarles el j*did* trabajo de escucharme, otra vez voy a responder "Bien, supongo".
Y eso será todo.
Y si has llegado a quedarte hasta el final de este texto y de alguna forma rara llegaste a concordar con él. Sal a buscar ayuda. Ahora. No somos normales.

No estamos bien. 
Firma con remordimiento e intriga: Gabby Orange